Anécdota "¡ Murió Sonriendo !"
MURIÓ SONRIENDO
Una agraciada Niña, de 16 años, que había sido convertida del mahometismo y vivía una magnífica vida cristiana ante sus Padres, enfermó y murió. Algún tiempo después, la Madre vino a la casa de los Misioneros (Evangelistas), y les preguntó qué medicina extraña habían dado a su Hija.
La Misionera, respondió un poco asustada de que la culparan de su muerte:
¡No, no le dimos nada!...
— ¡Oh, sí! —Insistió la Madre—. Nuestra hija, murió sonriendo. La gente de nuestra religión no muere de esta manera.
Samuel Vila
evangelizandohoy.es.tl